lunes, 5 de septiembre de 2016

¿Cómo lograr que nuestros hijos con síndrome de Down sean cada vez más independientes?

Si hay algo que nos preocupa a quienes tenemos hijos con síndrome de Down (SD) es cómo van a lograr la independencia que necesitan para desenvolverse en la vida cotidiana. Y si bien la preocupación suele enfocarse en la independencia (como capacidad de hacer cosas solo) y autonomía (toma de decisiones) a largo plazo, ésta no es una cosa que se obtenga de un día para el otro.  ¿Cómo lograr la independencia desde tan pequeños? Eso me pregunto frente a Faustina que apenas tiene dos años y cuatro meses. La clave es trabajar desde chiqitos en este tema, pues ello es esencial para lograrla en el futuro.

Como papás debemos promover que vayan alcanzando la independencia esperada en cada etapa y esto sólo se da gradualmente, en la medida que vamos dando la oportunidad de que hagan cosas por sí solos. Dejarlos que se vistan, que tomen la cuchara para comer, que vayan a buscar algo que le pedimos, puede ser una forma inicial de favorecer e impulsar que hagan algunas tareas solos.

A partir de que Faustina se largó a caminar realmente fue muy notorio su aumento en el grado de independencia para hacer muchas cosas. Por ejemplo, ya no quiere estar a upa o en su sillita alta (casi ni siquiera para comer) sino andar por ahí y manejarse a su antojo.

Pero el cambio que hizo respecto al desenvolvimiento con el cuerpo fue tremendo y con eso llegó también un cambio en la forma de comportarse y responder a requerimientos de todos los días. No solamente responde a las indicaciones que le damos y va en busca de algo que le pedimos sino también hace berrinches y patalea porque no quiere vestirse, que la ayuden con algo o que le indiquen cómo hacer una cosa.

Faustina ya sabe expresar qué quiere y qué no quiere y hace meses que va en busca de las galletitas que desea al cajón donde las guardamos que está a su alcance. Ya prefiere comer sola con una cuchara, quiere desvertirse y hasta sacarse el pañal! También pasa más tiempo entreteniéndose sola, colocando los juguetes donde ella quiere, andando de un lado para el otro por la casa o manejandose sola con el celular que me pide para manipular como quiere. Está en una etapa donde no se deja ayudar y hace uso de sus capacidades, un poco porque realmente quiere hacerlo ella y otro por su personalidad. "Quiero independencia, mamá!"

Si le pido que me alcance algo, lo hace y, por ejemplo, la hago ser parte de la actividad que vamos a hacer: "¿vamos a buscar el piyama? Ya es hora de ir a dormir". Entonces la espero, le doy la mano y me acompaña a buscar las prendas. Por supuesto que en el camino abrió un cajón y sacó todo lo que había allí! O "Me ayudás a hacer la cama?" y nos ponemos una de un lado y la otra del otro y vamos colocando sábanas, frazadas y acolchado mientras se muere de risa cuando hacemos flamear las sábanas.

Aunque todavía no va al baño sola, dice "caca" y "pis", y suele darme la mano para llevarme a cambiarla. Si tiró la mamadera con jugo de una mesita chiquita que le dejo a su altura para que tome cuando quiera, le pido que la levante y la deje sobre la mesa nuevamente. Aunque todavía esto cuesta bastante porque sigue revoleando todo, cuando ella quiere come sola su yogur o toma su jugo o mamadera sola sentada en un silloncito pequeño con una mesita. También va sola con un pote con galletitas convidando a todos.

Ahora le gusta tirarse al piso, levantarse y seguir la marcha, despatarrarse boca abajo, acostarse apoyando un cachete en el piso frío, investigar qué hay debajo de los muebles, esconderse en rincones, jugar a la escondida detrás de una pared o las puertas o sentarse a comer una galletita apoyada en las paredes. Así que si tenés un hijo con SD y estás ansiosa o preocupada como mamá porque aún no logra sentarse, sostenerse, pararse o caminar, por supuesto seguí con lo que te indican sus terapistas pero relajate que su momento para lograr eso que esperás ya llegará!

Ese desenvolvimiento con su cuerpo la ayuda con su independencia: le gusta más que antes todos los juegos donde deba arreglárselas sola. Se cuelga carteras, se pone la bufanda y se va hasta la puerta y hace que pone las llaves para salir. También intenta vestirse y desvestirse ella misma o a sus muñecos. O va a buscar los pañales o una toallita para limpiar al bebé o taparlo, por ejemplo. Además, va sola a tirar cosas al tacho de basura! Y para no bloquearle todas las puertas de los muebles que están a su altura, lo que hice fue habilitarle espacios y puertas a su alcance para que ella pueda usar con sus cosas, de manera que pueda abrir y sacar sus juguetes a su antojo.

Ya ves, Faustina está cada vez más independiente y eso nos alegra a todos!

Dale "Me gusta" en Facebook: Mi Vida con Faustina (página)
Seguinos en Twitter: @MividaconFausti
Entrá a nuestro Blog: mividaconfaustina.blogspot.com.ar



2 comentarios:

  1. demasado bella!! Es cierto, no desesperamos por ver el avance denuestros días, pero animo, es cierto, el día llega y vemos el resultado del esfuerzo trabajo y dedicación.

    ResponderEliminar
  2. Es así, tal cual! Desde el primer momento debemos trabajar la independencia de (todos) nuestros hijos, teniendo en cuenta (obviamente) su edad. A medida que crecen, más cosas podrán hacer solos. Nosotros solo tenemos que darles esa posibilidad (y no hacer las cosas que ellos pueden hacer solos!).

    ResponderEliminar